Oaxaca, México.— Con la venta de la mina San José, la Compañía Minera Cuzcatlán, filial de la canadiense Fortuna Mining, dejará de invertir al menos 18 millones de dólares anuales en el estado de Oaxaca, poniendo fin a más de una década de operación minera en la región del Valle de Ocotlán.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Economía federal, el sector minero representa una de las principales fuentes de inversión extranjera directa proveniente de Canadá, después del transporte. La salida de Fortuna Mining marca una reducción significativa de capital canadiense en la entidad.
La decisión de vender la totalidad de sus acciones en la Compañía Minera Cuzcatlán se dio ante la disminución de reservas minerales en la mina San José, ubicada en el municipio de San José del Progreso. Durante más de 10 años de operación, la empresa realizó inversiones por cerca de 10 mil millones de pesos y generó más de mil 200 empleos directos e indirectos.
En abril de 2025, Fortuna anunció la venta del 100 % de su participación en la Compañía Minera a JRC Ingeniería y Construcción S.A.C., una firma privada peruana. El acuerdo incluyó un pago inicial de 6.5 millones de dólares, 1.2 millones adicionales por conceptos de capital de trabajo e impuestos por cobrar, un posible pago de hasta 8.3 millones sujeto al cumplimiento de condiciones específicas, y una regalía neta del 1 % sobre la producción futura.
Fortuna destacó que durante 13 años logró posicionar la mina San José entre los 12 mayores productores de plata primaria a nivel mundial. Sin embargo, en diciembre de 2024 la mina fue colocada en “cuidado y mantenimiento” debido al aumento de los costos operativos y al agotamiento de reservas viables, iniciando así el proceso de desinversión.
Aunque el yacimiento aún contiene recursos minerales, estos no cumplen con los criterios económicos de la compañía para ser clasificados como reservas explotables.
Con esta transacción, Oaxaca pierde a uno de sus principales inversionistas extranjeros en el sector minero, y la región deberá enfrentar los impactos económicos y laborales que dejará la salida de la firma canadiense.