Oaxaca de Juárez, 26 de junio de 2025 — A pocos días del arribo masivo de turistas para las vacaciones de verano y las festividades de la Guelaguetza, el municipio de Oaxaca de Juárez enfrenta nuevamente la falta de papeleras y contenedores para residuos en espacios públicos, situación que pone en riesgo la limpieza y la imagen de la ciudad.

En los últimos meses, además de la ausencia de nuevos depósitos, desaparecieron los tradicionales cestos de carrizo que se habían colocado en el Zócalo y en la Alameda de León. Actualmente, los pocos contenedores disponibles están ubicados principalmente en la calle Bustamante y sus alrededores, pero en cantidad mucho menor a la registrada hace un año. Asimismo, se ha detectado que muchos de estos contenedores terminan siendo utilizados para basura domiciliaria o comercial, en lugar de residuos generados por transeúntes.

La problemática se agrava por la falta de cultura ambiental entre residentes y visitantes, quienes a menudo abandonan desperdicios en las calles, rejas, macetones y fuentes, generando focos de infección y deterioro en áreas turísticas y comerciales. Por esta razón, algunos comerciantes y habitantes han colocado carteles advirtiendo que los macetones no deben usarse como basureros, e incluso señalando posibles multas para quienes incumplan.

De acuerdo con cifras del ayuntamiento, la ciudad recolecta alrededor de 450 toneladas de basura diariamente, pero durante temporadas vacacionales como la Guelaguetza, se prevé un aumento de hasta 135 toneladas extras por día.

Esta situación se enmarca dentro de una crisis más amplia que comenzó en octubre de 2022, cuando cerró definitivamente el relleno sanitario que operó por 40 años en la Villa de Zaachila. Desde entonces, la ciudad enfrenta dificultades para la disposición final de sus residuos.

Víctor Romero, secretario de Servicios Vecinales, informó que actualmente se transportan entre 480 y 520 toneladas de basura al Centro de Transferencia Temporal ubicado en Santa Cruz Xoxocotlán, lo que ha permitido liberar el playón del río Atoyac, que hasta hace poco operaba como zona temporal para la acumulación de residuos.

Sin embargo, la falta de papeleras y la educación ambiental insuficiente continúan siendo retos importantes que requieren atención urgente para mantener limpia la ciudad durante uno de sus eventos culturales más importantes y la temporada alta de turismo.