Auto Cinema Retrovisor, la empresa responsable del globo aerostático que en abril pasado se quemó con tres pasajeros mientras volaba por Teotihuacan, ha vuelto a operar, pero ahora desde la clandestinidad, sin nombre comercial y con la venia de autoridades locales.
Empresarios dedicados a este negocio se han acercado para denunciar que Zaid Sánchez Vidal, el dueño de Auto Cinema Retrovisor y sobrino de Mario Vidal, comisario de seguridad de Teotihuacan, ha contratado a Israel García, El Chabelo, quien se dedica a buscar a los clientes por WhatsApp y redes sociales. El Chabelo es señalado como la persona que, desde su negocio llamado Zapata de Perro, vendió los boletos a los pasajeros que murieron en abril.
Otras autoridades corruptas que señalan los empresarios son: el presidente municipal de San Martín de las Pirámides, Édgar Martínez Barragán, y el inspector verificador del aeropuerto de Pachuca, José Ignacio Valentín Huitzil Ramos. Además, han detectado que personal de la Agencia Federal de Aviación Civil del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles está dentro de las nóminas de las empresas pirata.
“Están operando sus globos sin nombre comercial y sin las medidas de seguridad necesarias”, acusa Laura, una empresaria dedicada a los globos aerostáticos en Teotihuacan. “Estimamos que por la descarada corrupción entre autoridades y empresas irregulares hay 16 pilotos que operan los globos con licencias apócrifas”.
Otro empresario del ramo explica que un curso certificado para piloto de globo cuesta aproximadamente unos 250 mil pesos, en cualquiera de las dos únicas escuelas que emiten las certificaciones. En cambio, por 80 mil pesos, se puede expedir una licencia falsa en la plaza Santo Domingo, en el centro de la Ciudad de México.