La tarde del domingo, elementos de la Secretaría de Marina Armada de México detuvieron a Francisco “N”, presunto integrante de una organización criminal que opera en la región del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca. La captura se realizó durante una operación táctica sobre un camino de terracería que conecta las comunidades de Santa María Xadani y Álvaro Obregón.
Francisco “N” contaba con una orden de aprehensión por delitos relacionados con delincuencia organizada, derivada de su supuesta participación en múltiples actos delictivos en la zona de Santa María Xadani, donde su presencia había generado temor entre los habitantes debido a su vinculación con actividades ilícitas.
El detenido era considerado un objetivo prioritario para las autoridades federales, que ya lo investigaban por su presunta relación con un grupo criminal activo en la región. Aunque las autoridades no han revelado detalles sobre la célula criminal a la que pertenecería, se sabe que sus operaciones han causado preocupación por la violencia y desestabilización en las comunidades del Istmo.
Tras su captura, Francisco “N” fue trasladado a un penal de alta seguridad, donde espera que un juez determine su situación jurídica. Hasta el momento, no se ha confirmado oficialmente la identidad del grupo delictivo al que está vinculado.
La Secretaría de Marina, junto con autoridades ministeriales, hizo un llamado a la población de Santa María Xadani y localidades cercanas para que presenten denuncias si han sido víctimas de este individuo o de otros miembros del grupo criminal.
Este operativo forma parte de una estrategia nacional para combatir la delincuencia organizada en zonas vulnerables del país, como el Istmo de Tehuantepec, donde diversas bandas aprovechan vacíos de autoridad y condiciones sociales para expandir sus redes de extorsión, robo y violencia.
Aunque la detención representa un avance importante, la región continúa enfrentando retos significativos en materia de seguridad, gobernabilidad y acceso a la justicia. Organizaciones civiles han denunciado el abandono institucional, lo que facilita el arraigo de estructuras criminales.
Especialistas advierten que operativos aislados, aunque necesarios, deben complementarse con estrategias de prevención, fortalecimiento del tejido social y presencia institucional constante para evitar que nuevos actores delictivos reemplacen rápidamente a los detenidos.
La comunidad de Santa María Xadani espera que esta captura sea un paso hacia la recuperación de la paz y el restablecimiento del orden en una de las regiones más afectadas del país.