Nestlé anunció el despido inmediato de su director ejecutivo, Laurent Freixe, apenas un año después de asumir el cargo, tras descubrir que mantenía una relación romántica con una empleada directa que no forma parte de la Dirección Ejecutiva.
La decisión se tomó luego de una investigación interna liderada por el presidente de la compañía, Paul Bulcke, y el consejero independiente Pablo Isla, con apoyo de un asesor externo. Según Nestlé, la relación representaba un conflicto de intereses, lo que rompió las reglas de gobernanza y ética de la empresa.
Bulcke declaró: “Esta fue una decisión necesaria. Los valores y la gobernanza de Nestlé son pilares sólidos de nuestra empresa. Agradezco a Laurent sus años de servicio en Nestlé”.
Freixe llevaba casi 40 años en Nestlé, y en septiembre de 2024 había asumido como CEO global, reemplazando a Mark Schneider. Ahora, su sucesor será Philipp Navratil, quien trabaja en la compañía desde 2001. Nestlé confirmó que Freixe no recibirá indemnización por su despido.
La investigación se activó a partir de un señalamiento recibido en el canal de denuncias internas de la empresa. Además de Bulcke e Isla, la revisión contó con apoyo externo para garantizar transparencia.
Esta no es la primera vez que un CEO enfrenta problemas por relaciones personales en el trabajo:
- Bernard Looney, de BP, renunció tras no ser completamente transparente.
- Steve Easterbrook, de McDonald’s, fue despedido en 2019 por mantener relaciones con varias empleadas, aunque inicialmente recibió una indemnización millonaria que luego devolvió.
Bulcke aseguró que Nestlé seguirá con su estrategia y no reducirá su rendimiento pese al cambio de liderazgo.