El Fiscal General del Estado de Oaxaca, Bernardo Rodríguez Alamilla, expresó su inconformidad ante el fallo absolutorio emitido por el juez José Gabriel Ramírez Montaño en el caso de tentativa de feminicidio contra María Elena Ríos Ortiz. Según Rodríguez Alamilla, el juez no otorgó valor probatorio a pruebas contundentes presentadas por la fiscalía, lo que resultó en la cancelación de la boleta de libertad del acusado, Juan Antonio Vera Carrizal, en medio de una investigación por presuntos actos de corrupción.

María Elena Ríos, saxofonista y activista mixteca, sufrió un ataque con ácido el 9 de septiembre de 2019, que dejó más del 40% de su cuerpo con quemaduras graves, poniendo en riesgo su vida. A pesar de la gravedad de las lesiones y las pruebas presentadas, el juez consideró que no se acreditó la responsabilidad de los inculpados en la tentativa de feminicidio.

Rodríguez Alamilla subrayó que la fiscalía aportó pruebas significativas, como sábanas de llamadas y otros elementos que, en su opinión, acreditaban la responsabilidad de los acusados, pero estas fueron desestimadas por el juez. “No es algo que la fiscalía no haya probado, al contrario”, enfatizó el fiscal, asegurando que en la repetición del proceso se presentarán las pruebas necesarias para demostrar el delito.

En días recientes, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia, Berenice Ramírez Jiménez, informó que el juez Ramírez Montaño fue removido del caso debido a los presuntos actos de corrupción reportados por el Ministerio Público, los cuales están bajo investigación. La nueva audiencia para el desahogo de pruebas, ahora a cargo de un nuevo juez, está programada para el próximo viernes.