El Partido Acción Nacional (PAN) planteó al PRI, PRD y grupos empresariales apostar por emparejar el proceso de selección de su candidatura presidencial con el de Morena, y hasta seguir sus pasos, para recuperar el tiempo perdido: lanzar convocatoria en julio; depuración de aspirantes, foros y debates en agosto así como septiembre; y una encuesta final en noviembre.

Marko Cortés espera sea respaldado por Alejandro Moreno y Jesús Zambrano, es lanzar la convocatoria en julio y pedir requisitos como: haber sido considerado en mediciones de encuestas externas, los cuales les den un posicionamiento de al menos el 30 por ciento de reconocimiento de la ciudadanía y de intención de voto, que los haga competitivos frente a las corcholatas de Morena, y la entrega de firmas equivalentes al uno por ciento del padrón electoral de al menos 17 entidades.

Una vez cumplidos los requisitos, es decir, depurada la lista de aspirantes, la segunda fase será realizar foros y debates regionales en todo el país para posicionarse ante la ciudadanía durante al menos dos meses. 

Y para finalizar, al mismo estilo de Morena, se realizaría una encuesta con los mejores posicionados para definir en noviembre quién será la persona abanderada presidencial.

Para todo este proceso, el PAN plantea crear una especie de Comisión Electoral —integrada por liderazgos de los tres partidos políticos y la sociedad civil—, descartando elecciones primarias, para garantizar que los finalistas lleguen bajo las mismas condiciones y no con métodos diferentes de cada partido.