La estrategia de Palacio Nacional se mostró articulada la semana pasada. La Suprema Corte y el INE, aunque hagan su circo, continúan en el desprestigio; Alito Moreno, sumado a los problemas que lo agobian por su pasado corrupto, ya perdió la ilusión de mantenerse al frente del PRI; y el PAN, tal como se esperaba, a raíz del juicio ventilado en Nueva York, es tachado como una organización criminal, y las expectativas de nuevas acusaciones, aunque no se cumplan, apuntan hacia Felipe Calderón.

Con ese panorama, ¿ustedes creen que el voto de toda esa gente que se manifestó el domingo pueda canalizarse para terminar con el oficialismo en 2024? La oposición sigue sin existir, o al menos, no existe quien pueda dirigirla… Tal vez la 4T continúa con los planetas alineados.

Y a quienes parece que se nos están alineando algunos astros, es a los oaxaqueños. Pone contento ver cómo crece la expectativa sobre el castigo a las corruptelas de la administración anterior. El gobernador ha sido bastante claro en sus intenciones de terminar con la impunidad. Pero, ¿Hasta dónde llegará?

A todos los tiene de ‘’pechito’’ y algunos han sido señalados abiertamente, pero el verdadero combate a la corrupción se centra en el quebranto a los servicios de salud, donde suena Juan Carlos Marquez; o en la obra pública, donde Lazcano Vargas brilla como potencial encarcelado; o bien, la justicia podría tomar de estandarte el caso de los Conzatti, que aunque sea uno entre cientos de despojos, ha sido de los más mediáticos.

No obstante, esa necesidad del combate a la corrupción está viéndose opacada por las cuestiones de inseguridad que aquejan al estado. ¿De verdad estará la fundación colosio detrás de todas esas inestabilidades?, ¿Será una forma de salvar a su gente de la justicia?

En este mismo contexto, entra al quite Vera Salinas, que anda muy gallito enderezando a la policía estatal contra el gobierno ¿Será consciente de que la fiscalía podría fácilmente cortarle las manos? La falta de licitaciones durante su gestión en el secretariado de seguridad, así como la campante corrupción que opera con la ‘’venta’’ de regiones a los comandantes a lo largo del estado, le dejan bastante colita pa’ pisarle… además de que es notorio su enriquecimiento… pues hace como 2 años, cuentan que adquirió el inmueble que alberga el restaurante La Toscana, ¿Cuánto le echan?, ¿30 millones?.

En fin, Salomón ya dijo que la marina no se va. Y no está mal, seguramente es consciente de la incapacidad del presidente municipal capitalino, o bien, del vecino Inocente Castellanos, que ya tiene a Xoxo dentro de los municipios más violentos del país.

Ojalá que el gobernador no tenga que escoger entre combatir la corrupción y terminar con la inseguridad. Ambas son prioridad.