La farmacéutica AstraZeneca ha anunciado que retirará su vacuna contra el COVID-19, conocida como Vaxzevria, de todos los mercados globales. Esta decisión sigue a la tendencia de varios países que han dejado de utilizar la vacuna debido a la disponibilidad de opciones más efectivas contra las nuevas variantes del virus.

Aunque recientemente se informó sobre posibles casos de trombosis relacionados con la vacuna, AstraZeneca afirma que el retiro no está directamente relacionado con este tema. En su lugar, la compañía señala que la demanda de Vaxzevria ha disminuido considerablemente con la llegada de nuevas vacunas que ofrecen una mayor eficacia contra las variantes emergentes del virus.

Según informes de The Guardian, AstraZeneca ha expresado que existe un “excedente de vacunas actualizadas disponibles”, lo que ha llevado a la decisión de retirar su vacuna del mercado mundial.

Desde marzo, la empresa había decidido dejar de solicitar la autorización de comercialización en la Unión Europea, y esta autorización finalmente perdió vigencia el 7 de mayo. A pesar de esta retirada, AstraZeneca afirma que su vacuna ha sido crucial en la lucha contra la pandemia, contribuyendo a salvar millones de vidas en todo el mundo.

Se estima que se administraron más de 3 mil millones de dosis de Vaxzevria en todo el mundo, y la compañía sostiene que sus esfuerzos han sido reconocidos por gobiernos de todo el mundo como un componente crítico para poner fin a la pandemia global. AstraZeneca ahora planea colaborar con reguladores y socios para determinar los próximos pasos y contribuir de manera significativa al control de la crisis sanitaria mundial.