México intentará que los gobiernos de Brasil, Colombia, Cuba, Nicaragua y Venezuela acepten los vuelos de retorno de sus migrantes desde territorio mexicano, cuando hay un repunte de los flujos migratorios hacia Estados Unidos desde el Caribe, Sudamérica y Centroamérica.

El Instituto Nacional de Migración (INM) pidió a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) iniciar gestiones diplomáticas con esos países, una semana después de que la titular de esa dependencia, Alicia Bárcena, informó que el gobierno exploraba realizar “retornos asistidos” de migrantes a Ecuador, Venezuela y Colombia.

En un comunicado, emitido horas después de que un accidente de autobús causó la muerte de al menos 18 migrantes venezolanos y haitianos en el sur mexicano, el INM aseguró que contrató vuelos chárter y vehículos para trasladar a migrantes a otras entidades del país o llevarlos a sus países de origen.

La autoridad migratoria detalló que del 1 de enero al 3 de octubre identificó a casi 1.6 millones de “personas extranjeras irregulares” en el país —138 mil 251 menores de edad— y anunció que busca un terreno para instalar un albergue que asista a familias y menores de edad en Ciudad Juárez, en su frontera norte.

Un funcionario estadunidense de alto rango indicó ayer que el gobierno del presidente Joe Biden estaba reiniciando las deportaciones de venezolanos que cruzan ilegalmente la frontera con México, como parte de los esfuerzos para contener la avalancha de migrantes.