Oaxaca de Juárez, Oax., 29 de abril de 2025. A pocas horas de realizarse el Primer Simulacro Nacional de este año, el coordinador estatal de Protección Civil, Manuel Maza Sánchez, advirtió que el estado de Oaxaca no se encuentra preparado para enfrentar desastres naturales ni emergencias derivadas de la actividad humana, debido a la falta de inversión y planificación en los municipios.

De los 570 municipios del estado, solo alrededor de 70 cuentan con atlas de riesgo, muchos de ellos desactualizados, y la mayoría ni siquiera ha elaborado este documento clave para la prevención y atención de emergencias. Además, gran parte de los municipios carecen de consejos de protección civil activos o en funcionamiento.

“La situación es preocupante porque en caso de un desastre, los municipios pedirán apoyo al gobierno estatal, cuando por ley deben ser los primeros en responder”, señaló Maza Sánchez, quien criticó que las autoridades municipales no destinan el mínimo del 3% de su presupuesto anual en protección civil, como lo exige la ley.

Como ejemplo de los riesgos derivados de esta omisión, el funcionario recordó el reciente fallecimiento de seis personas —incluidos policías— dentro de un pozo en Tezoatlán de Segura y Luna, tragedia que pudo haberse evitado con una adecuada capacitación y protocolos de seguridad.

Maza añadió que, aunque el gobierno estatal ha elaborado 60 nuevos atlas de riesgo en el último año y Petróleos Mexicanos otros 14 para el Corredor Interoceánico, aún faltan más de 450 municipios por contar con este instrumento.

El Plan de Acción Climática de la Zona Metropolitana de Oaxaca (2024), elaborado con apoyo del Banco Mundial, advierte que la región enfrenta riesgos severos como sequías, inundaciones, deslaves e incendios. Entre 2000 y 2023 se emitieron 121 declaratorias de desastre y 118 de emergencia solo en esta zona, con pérdidas estimadas por fenómenos meteorológicos que alcanzaron los 6,385 millones de pesos en 2022.

Este martes 29 de abril, Oaxaca se suma al Simulacro Nacional, que simulará un sismo de magnitud 8.1 con epicentro en el Istmo de Tehuantepec. El ejercicio busca fortalecer la cultura de la prevención, evaluar los protocolos de respuesta y revisar el funcionamiento de sistemas de alerta, especialmente en la capital y zonas con altavoces instalados.

“Es fundamental que los municipios entiendan que la prevención no es opcional, sino una obligación legal y moral”, concluyó el coordinador estatal.