En lo que va del año 2025, Oaxaca ha registrado un total de cinco muertes maternas, tres de ellas ocurridas en mujeres que no recibieron atención médica. Las otras dos muertes se produjeron en instituciones de salud, una en el IMSS OPD y otra en una unidad médica de PEMEX. A pesar de estas trágicas pérdidas, el estado ha mostrado una disminución en el número de muertes maternas respecto al mismo período del año pasado, cuando se reportaron ocho casos en 2024, según datos proporcionados por la Secretaría de Salud federal.

Este descenso en las muertes maternas en Oaxaca se enmarca dentro de una tendencia nacional que también ha mostrado una leve disminución en las cifras. A nivel nacional, el país ha registrado 163 muertes maternas en 2025. El Estado de México encabeza la lista con 22 casos, seguido de Chiapas con 18 y Jalisco con 12. Las únicas entidades federativas que no han reportado muertes maternas hasta la fecha son Quintana Roo y Zacatecas.

No obstante, el promedio de retraso en la notificación de casos de mortalidad materna en Oaxaca es de 13 días, posicionándose como el estado con el mayor retraso en este indicador, según los registros de la Secretaría de Salud. Le siguen Sinaloa con siete días, Baja California con seis, y Jalisco y Nuevo León, con cuatro días cada uno.

La razón de mortalidad materna preliminar en México se calcula en 25.2 defunciones por cada 100,000 nacimientos estimados, lo que representa una ligera disminución del 0.5% en comparación con la misma semana epidemiológica del año anterior.

Entre las principales causas de las muertes maternas reportadas este año se encuentran las enfermedades hipertensivas, el edema y proteinuria en el embarazo, el parto y el puerperio, así como complicaciones graves como el aborto, la hemorragia obstétrica y la embolia obstétrica. Estos factores continúan siendo desafíos críticos en la atención materna en todo el país.

La disminución de muertes maternas en Oaxaca y en México en general subraya los esfuerzos para mejorar la atención médica en el embarazo y el parto, aunque sigue siendo necesario avanzar en la mejora de la cobertura y calidad del servicio para prevenir más tragedias.